Rotterdam/La Haya/Amsterdam

Hemos salido tempranito de Rotterdam, aunque no esta lejos de La Haya, nuestro primer destino de hoy.

Queremos disfrutarlo ciclando y poder sentir la sensación de salir de una gran ciudad, rodeados de coches, pero de forma segura por autenticas autopistas para la bicicleta.

Nada que ver con las entradas o salidas de las ciudades españolas.

Hemos llegado de una ciudad a otra sin ningún tipo de problemas, entre carriles bici o zonas 30, nos podemos imaginar ir en bicicleta de forma segura y tranquila, por ejemplo ¿de Barcelona o Madrid a cualquier ciudad de su extraradio?

A las 11 de la mañana nos esperan en la Embajada de Dinamarca de La Haya,

Mientras nos acercamos no podemos dejar de admirar la entrada de la estación de tren, un hervidero de bicicletas, miles de ellas aparcadas.

Llegamos tranquilamente y puntuales, aun estamos maravillados de como hemos conseguido llegar de una ciudad a otra sin tocar un palmo de carretera.

El recibimiento en la embajada ha sido muy cordial, nos hemos sentido arropados y mientras, tomábamos unas frutas y un te, hemos ido contando pormenores del viaje.

Con el lema recién acabado, Miriam les ha ofrecido una actuación personal.

Nos indican un camino para ciclar hacia Amsterdam que transcurre ente bosques y dunas, así que aunque nos maravilla el entramado de carriles bici que entrelaza las poblaciones, nos adentramos en esas sendas.

Aun no tenemos del todo cerrado el tren de Amsterdam a Berlin, estamos pendientes de recoger y pagar el billete, que nos había encargado Marlen una amiga Holandesa que habita actualmente en la Garrotxa.

Nos acercamos a la estación de tren más cercana en este caso, la de Leiden, en el camino el carril bici esta cortado por obras, nuestra admiración ha llegado al limite, en Holanda señalizan los caminos alternativos cuando hay obras en el carril bici!

Despues de que Miriam se relamiera, con un pescado fresco que venden fuera en la estación, cogemos un tren que nos dejara en Amsterdam Central.

No se la importancia de esta población, pero el numero de bicicletas aparcadas es inedescriptible, en todo tipo de aparcamientos, subterraneos, al aire libre, y todos los arededores de la estación llenos de biciceltas.

Aquí lo de los trenes y la bicicleta ya no es un problema, pagas un suplemento y la pones en el tren, y no solo tienen un espació, hoy hemos subido cada uno en uno, casi perdemos el tren, al subir una por el ascensor y el otro por las escaleras mecánicas, nos ha dejado en diferentes lugares del anden.

En Amsterdam el numero de bicicletas es increible, montañas de bicicletas aparcadas, circulando por todas partes, de todos los modelos, de todas las tallas, carritos, artilugios que nunca te imaginarias, inventos adaptados para la bicicleta y sin problemas...

Lo de ir una familia entera o los amigos en una misma bicicleta, es la normalidad, no como en nuestro pais, que si llevas a alguien en la bici es una falta grave y eres considerado casi un delincuente.

Los canales, los tranvías y las bicicletas, en muchas calles el coche ni existe, yo creo que los conductores ni se atreven a circular por algunos lugares de la ciudad.

En un momento de desoreientación dimos media vuelta, en medio de en una avenida, se acercaba un tranvia y Miriam se detuvo, el tranvia paro amablemente para dejar pasar a Miriam, aqui la bicicletaes la reina

A las seis de la tarde nos han llamado del programa “extraradis” de ComRadio y a parte de contarles nuestras peripecias con los trenes, Miriam ha vuelto a interpretar el lema. "Cycling to a Revolution"

Cenamos en un agradable “comidas para llevar” pero con una calidad y frescura de sus productos que solamente verlos ya te apetece comertelos.,llamado Foodware.

Ademas te puedes quedar y te sirven la comida en unas mesitas muy acogedoras.

Ya hacemos horario Holandes y estamos cenando alas 19:30 de la tarde, nos apetecería ir a dar una vuelta nocturna en bicicleta por Amsterdam pero el dueño del Hotel, un malcarado jefe no quería de ninguna forma dejarnos guardar las bicicletas dentro, después de muchos argumentos ha accedido a regañadientes, así que no es cuestión de arriesgarnos a salir y que nos deje fuera!!!

Mañana tenemos que estar en el tren de Amsterdam a Berlin, un tostón de tren, de las 8:58 a pasadas las tres de la tarde.